OPINIÓN: Duele a quienes lo vemos

7 Abr 06, 2022 Manuel Francisco Becerra, Opinión 33

Los Susurros de Kico Becerra

Hay cosas que se están volviendo insoportables en algunas ciudades como Cali; se está difundiendo igual que cualquier pandemia, una indecorosa e impúdica costumbre que atenta contra la estética y el derecho a no observar imágenes perturbadoras e hirientes a la sana convivencia social.

Y cueste lo que me cueste esta denuncia, debo referirme, sin tapujos, al desfile en calzón corto, bermudas que llaman, por parte de unos catanos que, sin ningún pudor, salen a la calle, van a edificios públicos, almacenes y hasta donde el médico, mostrando sus añejas extremidades, algunas flacas, como de cigüeña con SIDA, otras elefantiásicas, llenas inclusive de severas y notorias venas várices.

Se está volviendo costumbre que, los de la tercera edad, salgan en calzón a media pierna, culichupados, con camisetas ceñidas a sus notorias barrigas, con medias tobilleras y zapatillas Crocs; lo que es peor, no cualquier camiseta, la usan con colorinches caribeños reflectivos.

En una ciudad sin playa, este esperpento de moda jurásica, es supremamente ofensivo; se debe hacer una campaña para que, los abuelos no podamos salir a la calle en esas fachas que asustan a los niños.

Paseando con mi nieto por Chipichape, aparecieron unos veteranos como yo, en bermudas y el niño me dijo: Abuelo que tatuajes tan raros llevan los señores; le expliqué que no eran tatuajes, sino varices y picaduras de zancudos; ¿y eso duele? ripostó, a ellos no, pero, a los ojos de quienes los vemos, sí.

Creo que, si Rodolfo Hernández quiere mi voto, se debe comprometer a no usar bermudas y a prohibir esa moda en lugares distintos a las ciudades costeras; no me lo quiero imaginar con su peluquín colorado y en calzoncillos largos, recibiendo al presidente Biden, en Bucaramanga.

Mientras tanto, comenzaré desde ya una firmatón, para un plebiscito prohibiendo el uso del calzón corto en lugares públicos, a los varones de la tercera edad en Cali; advierto que la única excepción será la estatua Sebastián de Belalcázar, secuestrada aún por el alcalde Ospina, que podrá seguir usando sus calzones bombachos. Espero me acompañen en esta campaña de higiene visual.

Ñapa: Qué difícil es no escribir de elecciones en estos días; por considerar que hay demasiada falsa noticia, he decidido dar opiniones políticas solo una vez en la semana.

• Manuel Francisco Becerra, Opinión