Dos grandes escándalos mancharon hoy el nombre de las empresas municipales de Cali EMCALI.
El primero de ellos se dio a conocer en medio de las audiencias que se desarrollan en contra de los contratistas de la ut centros poblados, donde la fiscal del caso reveló que a través de terceros se habrían celebrado contratos con la empresa de servicios públicos de Cali. El secretario general de EMCALI, Carlos Olmedo indicó que después de este señalamiento se autorizó una auditoría interna de más de 800 contratos celebrados en el administración actual, sin encontrar relación con estos nombres.
El segundo escándalo se da cuando el concejal Juan Martín Bravo denunció las posibles irregularidades dentro del convenio interadministrativo celebrado con al ERT, donde esta entidad subcontrató con 5 empresas particulares, violando una de las cláusulas del contrato.
Además, el concejal afirmó que este contrato debía ser firmado por el gerente general y no por el gerente comercial. Ante esta irregularidad, en la tarde del martes Luis Fernando Cárdenas director del área comercial y gestión al cliente de EMCALI presentó su renuncia.
Este contrato tuvo un valor de más de 18 mil millones de pesos y con el cual se pretendía mejorar la atención integral de las actividades derivadas de la prestación de los servicios públicos domiciliarios, no domiciliarios y sus actividades, sin embargo, el cabildante aseguró que la empresa de servicios públicos podía haber contratado los servicios de manera directa para ahorrar los costos de la intermediación, que son aproximadamente 2 mil millones de pesos.
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