Últimas Noticias
- Tres personas de una misma familia murieron en accidente en la vía Buenaventura–Buga
- María Corina Machado gana el Premio Nobel de la Paz 2025
- Presidenta de Perú destituida por el congreso
- 17 armas ilegales salieron de las calles en operativos de la Policía en Cali
- Atentado con cilindros explosivos en Robles deja cuatro heridos, entre ellos dos menores de edad
OPINIÓN: La tragedia de la justicia en Colombia
Por estar distraídos en elecciones y en el estreno de gobierno, hemos dejado pasar la tragedia de la justicia colombiana.
De no creer que el ascensor del palacio de justicia de Cali, se haya descolgado del piso 6, en caída libre, causando 2 muertos hasta ahora y varios heridos muy graves. Ese desastre fue otra crónica de unas muertes anunciadas. En el último año, era más fácil que Avianca cumpliera, a que la gente no se quedará atascada en el ascensor.
Acudir a la justicia en Cali, era jugar a la ruleta rusa. Todos sabíamos que tarde que temprano habría su muerto. No es exagerado decir que ponerle una denuncia a alguien es un asunto de vida o muerte.
La solución es que no hay ascensores. Hay que subir por las gradas hasta 15 pisos. Una de las más graves amenazas en la sucursal del cielo hoy es ¡Te pongo a subir gradas!, es decir, te hago acudir a la justicia. Nada más patético.
La justicia va de culo como el ascensor de marras, los magistrados de la Corte, sala penal, detenidos por recibir sobornos para arreglar expedientes. Cosa que se sabía hace años.
Ahora, el expresidente de la corte, preso por corrupción, anuncia que va a destapar más casos iguales o peores de cochinos, eso sí, si le dan rebaja de penas. Comienza el cartel de los denunciantes falsos, conformados por los ex magistrados, que se inventaron eso.
El fiscal, abogado de quien investiga, esconde todos los días, con cortinas de humo, que no quiere meter preso al dueño del País o a su hijo. Con menos pruebas ha detenido gente para hacer show. El caso Odebrecht y de la carretera al llano, dormirá mientras este fiscal salga de su puesto para aspirar a la presidencia.
Los fiscales regionales parecen sancocho, no valen sin ají.
Ya no se necesita de abogados, lo que hay son sobornadores de Jueces y Fiscales.
La razón de la democracia es que haya justicia, impartida independiente y oportunamente. Sin justicia no hay democracia y menos paz. La justicia política es el cáncer terminal de las instituciones.
El pacto prioritario que requiere Colombia, es el de acabar con la corrupción en la justicia. Lo demás viene por añadidura.
Actualidad
